En el marco del Día por la Despenalización del Aborto habrá talleres sobre educación sexual, consejerías pre y post aborto, asesorías legales, muestras de fotografía e intervenciones artísticas.
Las actividades se completarán a las 18:00 con una Sentada para reclamar el tratamiento y aprobación del proyecto de ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo que fuera presentado por la Campaña y que cuenta con la firma de más de 50 diputadas y diputados y el apoyo de más de trescientas organizaciones sociales, políticas y académicas.
La decisión de declarar el 28 de septiembre como el Día por la Despenalización del Aborto fue adoptada por la Asamblea del Movimiento Feminista Latinoamericano en el V Encuentro Feminista Latinoamericano y del Caribe celebrado en Argentina en 1990, tomando en cuenta que las complicaciones por el aborto inseguro y clandestino constituyen la primera causa de mortalidad de las mujeres en muchos de los países de la región.
La Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito recuerda que en Argentina se calcula que alrededor de 500 mil mujeres recurren cada año al aborto clandestino, mostrando cómo la penalización no impide su práctica, sino que la hace peligrosa por la falta de recursos económicos de muchas mujeres.
El aborto es parte de la cotidianeidad de medio millón de mujeres que año a año desoyen mandatos sobre sus cuerpos y sus vidas, trayendo al escenario público un tema crucial: la maternidad debe ser voluntaria, deseada, proyectada.
Según cifras oficiales las complicaciones por abortos inseguros son la principal causa evitable de mortalidad materna en Argentina.
La organización destaca que desde la recuperación democrática en diciembre de 1983 han muerto más 3.000 mujeres como consecuencia de abortos inseguros, así se expresa esta gran deuda de la democracia que constituye un gravísimo problema de salud pública.
La mayoría de estas mujeres son jóvenes y empobrecidas, mostrando las desigualdades que atraviesa el problema del acceso al aborto cuando una mujer decide que no puede seguir adelante con un embarazo no deseado.
“Las mujeres tenemos derecho a vivir una vida plena y sin violencia: la prohibición del aborto y la falta de acceso a procedimientos seguros, de calidad y gratuitos constituye una violación a los derechos humanos de las humanas”, enfatiza.
“Despenalizar y legalizar el aborto es admitir que no hay una única manera válida de enfrentar el dilema ético que supone un embarazo no deseado; reconocer la dignidad, la plena autoridad, la capacidad y el derecho de las mujeres para resolver estos dilemas y dirigir sus vidas; y aceptar que el derecho a decidir sobre el propio cuerpo es un derecho personalísimo ya que éste es el primer territorio de ciudadanía de todo ser humano. Por esto exigimos que se debata y apruebe el Proyecto de Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo elaborado por esta Campaña”, agrega los responsables de la Campaña.
